Pero estas campañas no parecen tener demasiado impacto. Sin lugar a dudas hay un sector importante de la población que se niega a ver estos canales o que no tiene la posibilidad de hacerlo, pero posiblemente representen una gran minoría. “Todos lo tienen, incluso gente que yo sé que forman parte de los guardias revolucionarios me piden que les sintonice BBC farsi para ver las noticias. Todos quieren BBC y Manoto”, contaba un hombre que se dedica a instalar antenas parabólicas en un área rural montañosa y que por seguridad pide no dar su nombre. Lo paradójico de lo que contaba es que los periodistas de la BBC que trabajan en el servicio farsi han denunciado en múltiples ocasiones que ellos y sus familias han sido objeto de atención por parte de las autoridades.
Es una noche cualquiera de mayo pasado. En el informativo nocturno de Sedao Sima –como se conoce a la televisión local que tiene decenas de canales repartidos por el país–, la presentadora está sentada frente a un escritorio lleno de flores y su rostro, cubierto completamente por su hijab, apenas muestra alguna expresión. En las noticias, se destacan las declaraciones del líder supremo, a propósito de las nuevas sanciones impuestas por Estados Unidos contra Irán; dice que los estadounidenses volverán a fracasar, como lo han hecho en el pasado.
La noticia es cierta, pero faltaba un detalle del que posiblemente muchos televidentes ya se habían enterado durante el día a través de aplicaciones de mensajería como Telegram, que antes de ser bloqueada llegó a tener 40 millones de usuarios. El líder supremo había usado la metáfora de los dibujos animados estadounidenses Tom y Jerry para describir lo que había pasado entre ambos países desde la victoria de la revolución. “Todos esos complots han fracasado… (EE.UU.) volverá a fracasar tal como Tom en el popular cómic Tom y Jerry”, dijo el ayatolá Jamenei y así lo recogieron a la misma hora los otros informativos que se emitían desde el exterior.
Las palabras de quien es considerado la máxima autoridad del país habían sido eliminadas de los medios oficiales, lo que si bien no era nuevo –había pasado lo mismo en el 2011 cuando hizo referencia a los mismos dibujos–, sí causó bastante revuelo pues era una muestra más de cómo la televisión oficial moldea la verdad a su manera. Ya en el pasado presidentes tan distintos como Mahmud Ahmadineyad –considerado radical y afín al pensamiento más extremista– o Hasan Rohani –del ala moderada– han sido víctimas de la censura.
Fuente: lavanguardia.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario